Energías renovables: el Nitrógeno Verde en España

Como ya hemos citado en varias ocasiones, España ha hecho una gran apuesta por las energías renovables. Gracias a que nos encontramos en un lugar privilegiado dentro del continente europeo. Estamos en el camino de ser líderes en este sector gracias al sol y el viento. Pero también, dentro del compromiso medioambiental que tenemos, el gobierno ha puesto en marcha un plan de desarrollo de este recurso conocido como Nitrógeno Verde. 

Su nomenclatura se debe a que esta sustancia se obtiene de la electrólisis. Este es un proceso que separa el hidrógeno y el oxígeno que compone el agua, mediante un tratamiento que se logra con energía eléctrica renovable, procedente de la energía solar en su mayor parte. Aunque aún le falta recorrer un largo camino a nivel legal y de desarrollo, esta es la estrategia de la UE y el gobierno español para des-carbonizar el sistema energético y de esta forma cumplir los objetivos medioambientales.

En este punto se aclaró que esta es una gran oportunidad para España de liderar este mercado a nivel mundial. Pero conseguirlo conlleva una previa inversión en placas solares o fotovoltaicas y elaborar un sistema que permita optimizar el uso. Puesto que, producir nitrógeno verde actualmente tiene un nivel de eficiencia negativo, y la dicha inversión previa en obtener energía solar no compensa aún con la cantidad de energía obtenida, es decir, el nitrógeno verde necesita dos partes de energía solar para producir una parte esta sustancia y a demás hay que almacenarla correctamente.

Pero entre las ventajas que generará este combustible para las tres próximas décadas será su utilización en la industria donde no se puede usar energía eléctrica sino fósil, como pueden ser los fertilizantes. A su vez se podrá utilizar en el transporte pesado, de pasajeros y los vehículos ligeros. Se estima que con un depósito lleno y una pila de combustible se pueden conseguir hasta 700 km de autonomía con emisiones únicamente de vapor de agua y las recargas duran apenas 5 minutos. Algo que también puede sustituir es el gas natural, pero con una particularidad, esta energía se puede almacenar en las épocas de exceso de producción como puede ser en verano y usarse en invierno para producir energía eléctrica y calor.

Son muchas las ventajas que nos ofrece el N2, pero también debemos saber que necesita de una buena planificación al momento de implementar y administrar este recurso, pues el beneficio debe estar pensado principalmente en los consumidores.